* Noche 29. DIEZ LIRAS EN NOCHES DE DOPAMINA. (Liras de la 281 a la 290)

 * Noche 29. DIEZ LIRAS EN NOCHES DE DOPAMINA.
(Liras de la 281 a la 290)

Neurona exterminada
de emociones vividas que recuerdo
y función derivada
que maximiza acuerdos
-en dopamina-. Por tu amor me pierdo.

Eres pasión que admira
la palabra en mis labios si converso;
y así. como me inspiras,
para ti son mis versos... ,
mi niño precioso del Universo.

No sé si ya habré muerto
cuando sepas que llevo una vida
deshaciendo el entuerto
de la ilusión querida
que llevo dentro en mi alma compartida.

Hay un cajón cerrado
en el único mueble de mi mente
donde nunca han mirado
los ojos de esa gente
a quienes mi dolor es indiferente.

Tu actitud sí es plausible
tanto en cuanto te has parado a mirarme;
y así de indiscutible,
mi forma de mostrarme
no es otra que la de ti enamorarme.

El mar y sus confines
conversan, cual sonido inteligente,
con los sabios delfines
en olas y corrientes
murmurando amor... y hablando entre dientes.

Si en la constante huida
de intentar ir juntos a cada instante,
no es amor lo que cuida
nuestros pies caminantes,...
no habrá forma de salir adelante.

Adviento hipnotizado
de emoción compartida indestructible
que pasa por mi lado
con la forma tangible
de otro beso de amor irresistible.

Eres el hipocampo
que alberga mis recuerdos más osados.
Por tus neuronas campo
en brazos reposados
de almas en lazos de amor desposado.

Nadie comprende nada
cuando es nada lo único que comprende.
Tu piel articulada
por la mía desciende
en cada poro de amor que se enciende.

 ***

* Noche 29. DIEZ LIRAS EN NOCHES DE DOPAMINA.
(Liras de la 281 a la 290)

Neurona exterminada de emociones vividas que recuerdo y función derivada que maximiza acuerdos -en dopamina-. Por tu amor me pierdo.

Eres pasión que admira la palabra en mis labios si converso; y así. como me inspiras, para ti son mis versos... , mi niño precioso del Universo.

No sé si ya habré muerto cuando sepas que llevo una vida deshaciendo el entuerto de la ilusión querida que llevo dentro en mi alma compartida.

Hay un cajón cerrado en el único mueble de mi mente donde nunca han mirado los ojos de esa gente a quienes mi dolor es indiferente. 

Tu actitud sí es plausible tanto en cuanto te has parado a mirarme; y así de indiscutible, mi forma de mostrarme no es otra que la de ti enamorarme.

El mar y sus confines conversan, cual sonido inteligente, con los sabios delfines en olas y corrientes murmurando amor... y hablando entre dientes.

Si en la constante huida de intentar ir juntos a cada instantes, no es amor lo que cuida nuestros pies caminantes,... no habrá forma de salir adelante.

Adviento hipnotizado de emoción compartida indestructible que pasa por mi lado con la forma tangible de otro beso de amor irresistible.

Eres el hipocampo que alberga mis recuerdos más osados. Por tus neuronas campo en brazos reposados de almas en lazos de amor desposado.

Nadie comprende nada cuando es nada lo único que comprende. Tu piel articulada por la mía desciende en cada poro de amor que se enciende.

José Mateo Angulo García